Los Arcos honró a sus patronos, Santa María y San Roque

Los Arcos honró a sus patronos, Santa María y San Roque

La tradicional recepción de las autoridades de las Cinco Villas, del Valle de La Berrueza y del Valle de Aguilar de Codés tuvo lugar el Día de la Virgen

El 15 de agosto, Día de la Virgen, Los Arcos celebró una de sus jornadas más institucionales y emotivas de las fiestas patronales, la dedicada a sus patronos, Santa María y San Roque. Este día, como novedad, se produjo la tradicional recepción de las autoridades de las Cinco Villas, del Valle de la Berrueza y del Valle de Aguilar de Codés. También acudió la consejera de Cultura, Rebeca Esnaola.

El ayuntamiento fue el punto de encuentro entre las diferentes autoridades que acudieron a la cita de uno de los días grandes de las fiestas de Los Arcos. La jornada comenzaba a las 6:30 horas con la aurora de la Virgen, a cargo de los Auroros de Los Arcos y acompañantes, y las posteriores dianas.

La Corporación actuó como anfitriona, y a las 11:45 horas, salió desde el consistorio y recorrió el trayecto hasta la iglesia de Santa María junto al resto de autoridades de la zona, el vecindario, la Comparsa, los dantzaris, los Gaiteros de Arnedo y Cervera del Río Alhama, la txaranga Jaiak y la Agrupación Musical Los Arcos. Todos los colectivos participaron en la procesión, en la que diversas personas portaron a hombros a los patrones, Santa María y San Roque.

A lo largo del recorrido, se realizaron varias paradas, en las que diferentes colectivos cantaron a los santos. Concretamente, la salve y diversas jotas corrieron a cargo de la Rondalla Santa María en la Plaza la Fruta; más jotas sonaron gracias a Aitana Osés Escarza y los acordeonistas Maite Fernández Gurucharri y Jorge Argote, en la calle Mayor, lugar en el que también se pudo escuchar la voz de Juana Arteta, a modo de jota. El coro parroquial actuó en la plaza San Francisco y, por último, Rafael González cantó su jota en la calle Bagera. También sonó la voz de la vecina Ainhoa Larumbe en la plaza de Santa María.

Tras la procesión, se celebró una misa solemne en honor a los patrones. La jornada culminó con actos taurinos y a ritmo de la orquesta Meteoro.

Mayor relevancia al Día de la Virgen y más ganderías

Las fiestas de Los Arcos se celebraron del 14 al 20 de agosto. Entre las principales novedades del programa de este año fueron la ‘puesta en valor’ del Día de la Virgen, el de la procesión, por parte del Ayuntamiento. “Es el día de la patrona, en el que se celebra la procesión, y consideramos que es un día al que hay que darle más relevancia de cara al exterior. Por ello, invitamos a las autoridades este día para hacerlo más relevante e institucional, y que la pochada se convierta más en un momento para los del pueblo”, explica Eduardo García de Galdiano, alcalde de Los Arcos.

Y la apuesta fuerte del Ayuntamiento, este año, fue el cambio de las ganaderías para los eventos taurinos. “Hemos contado con diferentes ganaderías para cada uno de los días de fiestas para que haya más encierros y vaquillas. La gente está contenta con la decisión”, informa el alcalde.

Relevo generacional en la pochada

La tradicional pochada, que se celebró el día 17 de agosto, y que cumplió la XXVIII edición, contó con nuevos cocineros. Este año, se solicitó relevo generacional y 20 chefs se congregaron para cocinar este producto tan emblemático, característico y sabroso de las fiestas de Navarra. Un total de 1.620 raciones se sirvieron en la calle Mayor. Este año, la recaudación obtenida en la pochada solidaria será donada a la asociación Hodeilargi Batten CLN6.

El día de los niños y niñas, el de las cuadrillas, el de las asociaciones y el de la juventud pusieron fin a unas fiestas inolvidables, en las que reinó la alegría y no hubo incidentes.

Un sueño inimaginable

Ricardo Etayo Ganuza, de 70 años, es un arqueño de corazón. Toda la vida ha estado vinculado a la vida cultural y de ocio de Los Arcos. Este año, ha cumplido un sueño inimaginable: lanzar el cohete de las Fiestas de Los Arcos. Ricardo nunca había imaginado que este hecho pudiera suceder. Con emoción y orgullo, fue el protagonista de este momento el 14 de agosto. El Ayuntamiento le concedió este honor porque Ricardo tiene ‘algo especial’ con Los Arcos, y siempre ha colaborado en la vida cultural y de ocio de la localidad, desde que ponía música en la antigua sala de fiesta Margar hasta cuando pincha, en la actualidad, cualquier canción moderna que, hasta sus nietas, le piden. Sueño cumplido, Ricardo.

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