Los puestos tendrán una distancia de al menos 6 metros de distancia frontal permitiéndose una distancia de 4 metros entre los laterales. Entre el vendedor y los clientes se establecerá un mínimo de 2 metros de distancia. Se evitará que los clientes toquen los productos. Habrá que disponer de dispensadores de geles desinfectantes para uso de vendedores y usuarios. La distancia mínima de los clientes será de un mínimo de 2 metros. La policía local y las fuerzas de seguridad velarán por el cumplimiento de estas normas, restringiendo el acceso a la plaza, si es necesario, para evitar accesos indebidos, evitar aglomeraciones, y evitar cualquier contacto social que no esté relacionado con la compraventa.