Este año el mojón ocupó su sitio en el lugar elegido, que varía cada año: las peñas de Aitzurdina, en la muga de Ecala con Eulate. La presidenta de la Junta de Limitaciones, Asun Arrastio Corres, protagonizó la colocación de la piedra cumpliendo con la lectura de la oración y bendición y del acta de acuerdo, un ritual que recuperaba en su primera edición el vecino e historiador Balbino García de Albizu. Precisamente, en el contexto de la fiesta del valle, García del Albizu recibió un homenaje y reconocimiento por parte Centro de Estudios de Tierra Estella (CETE). Se trataba del XII Premio CETE-LI.
Hasta las peñas de Aitzurdina se desplazaron numerosos vecinos, algunos a pie y otros en coche. Era el inicio de una programación, completa para toda la jornada, que se desarrolló en Eulate. A las once de la mañana hubo partidos de pelota; después, talleres de maquillaje, de tatuajes y de globoflexia.
El homenaje a Balbino García de Albizu se celebró a la una de la tarde y los integrantes del taller de danza de Tierra Estella tomaron el relevo antes de la comida popular que reunió a los vecinos en torno a la mesa. Por la tarde, hubo un espectáculo para todos los públicos, mejicanas más tarde y todo ello quedó coronado por un calderete popular y por bailables hasta la madrugada.
