Buen ambiente y participación en las fiestas de Los Arcos

Buen ambiente y participación en las fiestas de Los Arcos

La villa vivió siete jornadas de blanco y rojo dedicados a sus patronos, Santa María y San Roque. No faltaron los espectáculos taurinos, los conciertos ni comidas populares, como la pochada para 1.600 comensales

Los Arcos disfrutó del 14 al 20 de agosto sus fiestas en honor de los patronos Santa María y San Roque. El buen ambiente y la alta participación destacaron en unas jornadas de blanco y rojo que ofrecieron un programa de actos dirigido a todos los públicos y con momentos de encuentro entre vecinos, amigos y familiares. El historiador Víctor Pastor Abáigar inauguraba la semana desde el balcón consistorial y repetía experiencia 20 años después de su primera vez.

Hace dos décadas el motivo era la publicación de un libro que firmaba junto al historiador, también de Los Arcos, Román Felones. Con 91 años volvía a ser protagonista fruto de la voluntad popular. Este año, el Ayuntamiento de Los Arcos decidía implicar a la ciudadanía a la hora de elegir a la persona merecedora del honor.

Esta novedad se introducía junto a otras en la organización de unas fiestas que han supuesto al consistorio una inversión de 140.000 euros. El programa incluía este año la contratación de seis ganaderías diferentes, una para cada día de festejos taurinos, entre las que se estableció, asimismo, un concurso a la mejor. El fallo está aún por decidir.

Otras novedades que trajeron consigo las fiestas fueron los nuevos vestidos de los gigantes arqueños, que este año cumplieron 75 años de vida, y la creación de un nuevo espacio juvenil, en el frontón de las cercas, donde se instaló una txozna y se organizaron conciertos con grupos locales.

Tras la primera jornada festiva, el jueves 15 fue el día de la Virgen, celebrado con la procesión en la villa. Tomó el relevo el Día de las Personas Mayores el viernes 16, dedicado a San Roque y a la quinta de 1978. El Día del Niño llegó el sábado, con la toma de posesión de la Corporación infantil, disparo de cohete y encierro simulado, como momentos destacados; el domingo 18 lo disfrutaron especialmente las asociaciones locales; siguió la pochada el lunes 19 y el martes 20, la juventud vivió su día. No faltó el ciclismo, una comida popular, ni la música, ni las vacas ni el Pobre de Mí, a las doce de la noche desde el balcón consistorial.

La pochada popular cumplía en este 2024 su XXIX edición, con una sobremesa amenizada por la txaranga Jaiak. Un grupo de unos 25 voluntarios, con relevo generacional, se afanaba durante la mañana en la preparación del guiso en una bajera cedida por Joaquín Ancín. Fueron 400 los kilos de producto guisados para una degustación que reunió en la calle Mayor a cerca de 1.600 comensales.
La gastronomía tiene su peso y su importancia en las fiestas de Tierra Estella. En Los Arcos, las cuadrillas siguieron rindiendo tributo a la buena mesa con la celebración de una abadejada el miércoles 21, ya fuera del tiempo ordinario de las fiestas arqueñas.

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