El proyecto ayudará a los participantes en un proceso de acompañamiento y formación personalizados. Dos fincas, Zunbeltz y La Planilla, pertenecientes al Patrimonio Forestal de la Comunidad foral, han sido cedidas para la iniciativa con una autorización de uso de diez años. Los terrenos están ubicados en el entorno del parque Natural de las Sierras de Urbasa-Andia y suman entre las dos 531 hectáreas, de las cuales más de 34 son de pastos.
La iniciativa implica a los Ayuntamientos de Abárzuza, Guesálaz, Yerri, Lezáun y Salinas de Oro, al Gobierno de Navarra, el CPAEN, la UPNA, Teder y el Intia
En la finca Zunbeltz, de 231 hectáreas, se construirá un aprisco, o un cercado para el ganado multifuncional, de 200 metros cuadrados. Estos terrenos se destinarán a la realización de experiencias en ganadería, fundamentalmente ecológica en extensivo, donde se podrán testar y desarrollar los proyectos innovadores que fomenten el relevo intergeneracional. Además, la Mancomunidad Andia busca otras fincas por la zona.
La presentación del proyecto tuvo lugar en la finca de Zunbeltz con la participación de representantes de las entidades implicadas: la consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Itziar Gómez; el presidente de la Mancomunidad Andia y alcalde del Valle de Yerri, Edorta Lezaun; la presidenta de CPAEN-NNPEK, Mirian Otxotorena; el representante de la UPNA, Iñigo Virto; el concejal de Lezáun, Javier Osés; la técnica de la Mancomunidad Andia, Elena Cereceda; y el director del CI Agroforestal, Miguel Ángel Jordán. También asistieron representantes de INTIA y de la Asociación TEDER.
El presupuesto del proyecto asciende a 190.779 euros. El Gobierno de Navarra financia el 90% (el 65% procedente de los fondos FEADER, ‘Europa invierte en zonas rurales) y el 10% restante lo aportan los socios participantes -Mancomunidad de Andia, 8%; CPAEN / NNPEK, 1% y UPNA, 1%).
El presidente de Andia y alcalde del valle de Yerri, Edorta Lezaun, destacó en la rueda de prensa el esfuerzo de los cinco Ayuntamientos de Andia por trabajar. “Son pueblos de pocos vecinos, con mucha extensión y con un modelo agrario que ha hecho desaparecer al sector primario. Hace cinco años nos unimos para afrontar la despoblación y otros nuevos retos como el cambio climático. Ahora nos vamos a dedicar a ejecutar lo planteado durante el próximo año y medio”, dijo.
Por su parte, la consejera Gómez destacó el objetivo claro de la iniciativa novedosa: el relevo generacional en el sector ganadero. “Estamos ante una excelente oportunidad para hacer frente al gran problema de la despoblación en el mundo rural porque falta relevo”. Asimismo, y precisamente como programa piloto, destacó la importancia de la transferencia de los resultados de la experiencia al resto del sector primario en otras comarcas de Navarra.
Traspaso generacional
La falta de relevo generacional en la actividad agraria es uno de los principales retos a superar para promover el sostenimiento de la producción agroalimentaria y de la población rural. Tanto en el ámbito de Navarra como en el de Tierra Estella, el sector agrario está cada vez más envejecido. En el conjunto de Navarra, según los datos del censo ganadero, 240 explotaciones desaparecieron en el período de 2008 a 2018. En Tierra Estella existen actualmente 853. La metodología que se implementará con Dulantz estará basada en el enfoque ‘Campesino a campesino’, en la que personas ganaderas en activo asesorarán directamente la actividad agro-ganadera ecológica.