
El corazón de Estella paró el tráfico para albergar lecciones de futuro para la ciudad y el planeta. La asociación Erein, dedicada a la socialización, integración, ocio, tiempo libre y ayuda social, la Policía Foral y el Centro de Salud hicieron su aportación con diferentes talleres y dinámicas de sensibilización.
El paseo de la Inmaculada, no sólo se vació de coches, también se llenó de color, de deseos y de buenos propósitos vinculados con la ciudad y el medio ambiente. Guiada la actividad por algunos de los doce voluntarios de Erein, los escolares pintaron con tizas sobre el asfalto ideas y dibujos vinculados con el modelo de ciudad que quieren y sus compromisos con el entorno natural.
Reducir emisiones
La actividad más creativa se completaba con otras dos dinámicas preparadas por el colectivo. Uno de los integrantes de Erein, Mikel Zalduendo, explicó en qué consistían. “Con un ovillo de lana hemos ejemplificado cómo un elemento del ecosistema que se ve alterado afecta también a toda la cadena. También hemos sensibilizado sobre las emisiones de CO2 tan dañinas para el ecosistema y hemos fomentado el consumo local y cómo hacerlo a pie o en bici ayuda al medio ambiente. El alumnado ha podido ver cuánto CO2 evitan emitir comprando a pie por Estella en lugar de coger el coche y desplazarse al hipermercado”, destacó.
Mientras que la actividad bullía en el paseo de la Inmaculada, las acciones tampoco paraban en las proximidades. En la calle San Andrés, la narradora Inés Bengoa sensibilizaba mediante un cuenta-cuentos a los escolares y, junto a la fachada del centro de salud, personal sanitario ofrecía información sobre movilidad y salud. En la vecina plaza de los Fueros, agentes de la Policía Local instalaron un circuito de seguridad vial que atrajo la atención, de manera práctica, del alumnado.
La Semana de la Movilidad, celebrada en Estella del 14 al 22 septiembre, secundó la iniciativa europea que cuenta con el apoyo de la Comisión Europea. La campaña, a nivel comunitario, está dirigida a sensibilidad, tanto a los responsables políticos como a la ciudadanía sobre las consecuencias negativas que tiene el uso irracional del coche en la ciudad, tanto para la salud pública como para el medio ambiente y sobre los beneficios del uso de modos de transporte más sostenibles como el transporte público, la bicicleta y los desplazamientos a pie.