Llevas algo más de un año en Australia, ¿ha cambiado mucho tu vida en este tiempo?
Sí, pero sobre todo al llegar. Ahora ya es un día a día que puede ser parecido al de España. Pero cuando llegas a un sitio sin hablar el idioma, cuando tienes que buscar un trabajo, una casa, nuevos amigos, todo, sí que es un cambio radical.
¿Cómo surge la oportunidad de ir a Australia?
Yo siempre había querido ir un año por ahí, recorrer mundo y visitar otro país, porque me encanta viajar. Justo cuando lo tenía en mente llegó el Covid y ya no lo pude hacer. Pero dos chicos de mi trabajo habían estado en Australia y me hablaban maravillas. Dije, allá voy. Miré en agencias qué países ofertaban porque te facilitan las cosas, y dudé entre Canadá y Australia. Pero, después del Covid, me decidí por el buen tiempo, la playa, el surf… Y por supuesto quería aprender a hablar inglés.
¿Con qué objetivos tomaste la decisión?
La excusa era aprender inglés, porque me da mucha rabia andar por ahí cuando viajo y no poder comunicarme. Pero es verdad que me encanta viajar, y la vida en Navarra siempre va a ser la misma vida siempre. Necesitaba algo nuevo, un cambio. Aquí está la Gran Barrera de Coral para bucear, diferentes especies de animales… Me apetecía algo más estimulante.
¿Ha sido fácil encontrar un trabajo en Australia?
Fue fácil encontrar trabajo cuando llegué porque se necesitaba gente en el sector servicios. En mi tercer día en Australia ya estaba trabajando sin saber hablar inglés.
¿Cómo está el tema de los visados?
Australia es difícil en este sentido y te piden un montón de cosas, pero no es imposible. Lo hice a través de agencia para facilitarlo todo y aun así fue engorroso. Hay dos tipos de visados: Work Card Holiday para trabajar y la visa de estudiante, que yo solicité. Quien quiera venir a estudiar tiene las puertas abiertas y la estancia dependerá de la duración del curso. Yo estoy aquí por esta vía, la de estudiante.
¿Aspiras a un trabajo vinculado con tu formación?
No, no lo busco. Estudié Forestal y aquí no podría trabajar por el tema del inglés. Además, convalidar títulos es muy complicado. Como mucho, si avanzara con el inglés, intentaría probar como guía de snorkel o algo así, pero no como forestal.
¿Qué es lo que más te llama la atención del país?
Su naturaleza. Sus parques, su diversidad, porque es un país tan grande que de un sitio a otro el paisaje cambia muchísimo. Su fauna es flipante, me fascina.
¿Qué se echa de menos?
La comida, sin duda. El hecho de ir a un bar y que haya algo que no sea de una hamburguesa, ‘fish and chips’ y patatas fritas. Y que no te cueste un riñón, si pides un filete de mala calidad. Sueño con las barras de pinchos. Y obviamente, se echa de menos a la familia, y el ambiente que hay allá.
¿Cómo es un día de tu vida?
Es muy parecido al de España. Me levanto, trabajo en un hotel en tareas de limpieza de 9 a 16 horas. Vuelvo a casa, cansada, a días vamos a tomar algo por ahí, o a hacer la compra, o a dar un paseíto por la playa. Para mí la diferencia es que aquí mi filosofía se basa trabajar todo lo que puedo durante dos meses para luego marcharme tres semanas o un mes de vacaciones.
¿Crees que en España cuesta más que en otros países hacer un parón como que el que tú estás haciendo?
Diría que en España tenemos más adquirida la cultura de trabajar y de no perder el trabajo, y aquí en Australia, en mi situación, el trabajo da igual porque no son los trabajos de tu vida y, si te echan, te vas a otro lado. Aquí hay mucho más trabajo y mucha movilidad. Es mucho más fácil y te sientes más libre.
¿Recomendarías la experiencia?
Por supuesto. Fuera de casa vives aventuras todos los días, conoces gente, haces viajes, aprendes otro idioma, te expones a cosas nuevas.
¿Te ves así mucho tiempo?
En Australia me veo tiempo, no tengo ningún problema, porque aquí las cosas son diferentes, pero es verdad que tengo una excedencia en mi trabajo y tendré que volver.
¿Qué estás aprendiendo?
Sobre todo, a vivir el día a día porque aquí nunca sabes lo que va a pasar mañana, lo que te van a proponer. Estoy aprendiendo que aprender un idioma es más difícil de lo que esperaba porque acabas rodeándote de gente española. Aprendes a enfrentar tus miedos, porque haces algo nuevo y en otro idioma.
¿Has podido recorrer el país?
Sí he viajado bastante, el año pasado recorrí el norte, fui a Darwin, al Western y en Navidad recorrí el sur. He buceado en Linconls con el tiburón blanco, he visitado Sidney y los alrededores de Gold Coast, que es donde vivo.
¿Tienes fecha de vuelta?
Vuelvo en julio de vacaciones tres semanas. En principio me quedo en Australia hasta marzo de 2024. Luego no lo sé, pero tengo muchas cosas que ver aún.
FICHA
>NOMBRE Y APELLIDOS. Marina Lazcano Sola.
>FECHA Y LUGAR DE NACIMIENTO. 21/12/1991
>FORMACIÓN. Grado Superior de Guarda Forestal.
>PROFESIÓN. Operaria en Laboratorios Cinfa.
>RESIDENCIA. Gold Coast, al Este del país.
LO MEJOR Y LO PEOR
LO MEJOR. La gente que he conocido aquí. Conectas rápido porque están en la misma situación que tú. Y los viajes y la naturaleza. Estar viendo un atardecer en un faro precioso con sol cayendo por el mar y ver tropecientas ballenas
saltando por delante de ti en España no lo ves. O bucear con el tiburón blanco o ver la barrera de coral por el aire, ver nacer tortugas… A mí que me encanta la naturaleza, me parecen increíbles los koalas y los canguros”.
LO PEOR. “El idioma y trabajar cara al público. Si te gusta hacer bien tu trabajo, lo pasas fatal. Y lo lejos que está esto de casa”.
TURISMO
El top 4 de Marina en Australia
1.- La Gran Barrera de Coral. “Un plus es disfrutarla desde el aire”.
2.- Isla de Heron. “Este lugar ofrece la posibilidad de ver salir cientos de tortuguitas. Es un espectáculo cómo las gaviotas se comen la mitad y en el mar hay tropecientos tiburones comiéndose la otra mitad. Me pareció súper salvaje”.
3.- Bucear con el tiburón blanco en Port Lincoln. “Es uno de los pocos lugares donde se puede hacer”.
4.- Ningaloo Reef. “Paraíso de la práctica de snorkel”.