El día anterior a la denominada Fiesta de la Sal, se celebraron, como preludio, una serie de actividades. Diversas personas realizaron un recorrido guiado por el patrimonio de Salinas de Oro y disfrutaron de una cata de productos ecológicos de la zona. El frontón de la localidad acogió, como colofón, una exhibición de trial bici de la escuela Raúl Ros.
El domingo fue el día grande. La Fiesta de la Sal atrajo a miles de personas. “Este años hemos batido el récord triplicando la asistencia respecto al año pasado. Los parkings habilitados para la ocasión no fueron suficientes y la carretera de acceso a Salinas estuvo colapsada de coches toda la mañana”, informaba Charo Apesteguía, gerente de la asociación Tierras de Iranzu.
Multitud de actividades
La inauguración y apadrinamiento de la primera cosecha de la sal de manantial contó con Miguel Cuesta, vicepresidente de Osasuna, y con Iñaki Andradas, del restaurante Baseberri. La gastronomía tuvo un papel importante. Se repartieron 1.500 pinchos de cordero, mini hamburguesas de carne, nuggets, risotto con cordero y alcachofas. También se celebró un concurso de cata de sales del mundo a cargo de Ipaisal. La obra de teatro del grupo Txaloka e Iskidi, ‘La alocada trashumancia de las ovejas”, sorprendió con la actuación de 40 actores.
Otra de las novedades fue la exhibición de pastoreo a cargo de la asociación Eat Adiskideak. Los más pequeños disfrutaron en los talleres y el masterchef infantil y se refrescaron en los baños de agua salada y las zonas de baño de pediluvio. El show cooking en directo fue todo un éxito gracias a grandes chefs navarros que cocinaron y ofrecieron sus platos a los asistentes para que los pudieran degustar. La feria de artesanía y ganado también tuvo muy buena acogida.
La Fiesta de la Sal es posible gracias a la organización de la asociación turística Tierras de Iranzu y el Ayuntamiento de Salinas con la colaboración del departamento de Turismo del Gobierno de Navarra, Reyno Gourmet, IGP Cordero de Navarra, D.O. Vinos de Navarra y EAT Adiskideak.