La programación festiva comenzaba en las calles de la villa temprano, a las 7 h, con una aurora en honor de San Vicente a cargo de la asociación Auroros Santa María. A las doce, se oficiaba misa solemne en la parroquia, presidida por el Ayuntamiento en cuerpo de Corporación, y, una hora después, la actividad se retomaba en el ayuntamiento, con la bendición del pan y el vino y su reparto.
Los Arcos celebra el 22 de enero desde tiempos inmemoriales. Antiguamente se hacía en la ermita que da nombre al diácono y que se levantaba en el poblado de Yániz. Era costumbre organizar una colecta de alimentos por las casas para disfrutar de una merienda entre amigos.
En la actualidad, la festividad mantiene su esencia adaptada a los nuevos tiempos, y las cuadrillas y las familias se siguen reuniendo en esta fecha especial en torno a la mesa. El pan y el vino que se reparten bendecidos acompañan los guisos de la jornada.