Hasta el punto elegido en el paseo de Los Llanos se acercaron la presidenta de Anapar, Begoña Gómez; la alcaldesa de Estella, Begoña Ganuza; representantes de la Asociación de Minusválidos Amife y varios socios de Anapar en Estella. Ocho fueron los árboles plantados, con el apoyo de la brigada municipal, uno por cada socio de la ciudad del Ega. La actividad, que se ha realizado también en otras comarcas de Navarra, pretende sensibilizar sobre la dolencia y contribuir con actividades a reducir el aislamiento social de los afectados, de la misma manera que se cumplen fines medioambientales.
La asociación tiene presencia en Estella a través de varios servicios, que se ofrecen para los socios del colectivo en la sede del club de jubilados Ega. En concreto, los socios tienen a su disposición dos sesiones de fisioterapia y una de terapia ocupacional cada semana y una sesión de apoyo psicológico una vez al mes. “Lo que queremos es dar a conocer a los afectados de Párkinson las actividades que se ofrecen en la zona para que las puedan aprovechar”, decía la coordinadora, Sara Díaz de Cerio.
Entre los asistentes se encontraba el matrimonio estellés formado por José Mari Ocáriz Larrainzar y Mª Dolores Basarte Ruiz. “Mi marido lleva diez años luchando contra esta enfermedad. El Párkinson no se cura y tiene temporadas mejores que otras”, decía. Okáriz y otros socios, pusieron su granito de área y contribuyeron al medio ambiente y a la visibilidad de esta enfermedad en el parque de Los Llanos.