
El gerente de la Mancomunidad, Nicolás Ulibarri, destacó en rueda de prensa la importancia de llegar a la sociedad para que la ciudadanía colabore en una mejor separación de los residuos. En este sentido, para facilitar una mayor calidad en la recogida, el nuevo modelo de cinco contenedores ha permitido sacar del contenedor amarillo otros residuos no orgánicos, como son los vinculados con el aseo personal (es el caso de pañales, compresas y mascarillas), además de ceniza, flejes y cuerdas, que tienen ahora su lugar en el gris.
Ulibarri recordó que el principal caballo de batalla que afronta tradicionalmente la Mancomunidad es la eliminación de impropios, generalmente la presencia de envases en el contenedor marrón. “Es nuestro talón de Aquiles porque los envases ensucian y dan peso a la materia orgánica. Si la gente separa bien la orgánica, por defecto se obtiene un mejor resultado también en el contenedor amarillo”, expresó.
La responsable de Residuos de la entidad, Raquel Crespo, ofreció datos sobre el nuevo modelo de recogida y recordó el objetivo que establece la Ley de Residuos de Navarra para 2027, cuando el porcentaje de impropios en materia orgánica no deberá superar el 10%. El índice de 2024 es del 19,6%. En cuanto al porcentaje de impropios en el contenedor amarillo, el pasado año fue del 30%, fundamentalmente papel, cartón, textil, restos de comida, cuerdas y cerámica, que estaban mal depositados.
Con el objetivo de seguir avanzando en una recogida de residuos de calidad, la Mancomunidad de Montejurra tomó otra medida en 2024: reducir las tapas de los contenedores. “Hemos comprobado que, limitando las tapas de apertura en los contenedores de materia orgánica, en el de envases y en el azul, se consigue que se deposite sólo el residuo solicitado con una mayor calidad que en un contenedor con boca grande”, destacó Raquel Crespo.
¿Cómo hay que separar ahora? Crespo recordó que el contenedor gris permite desdoblar el residuo de envases y, por tanto, los cinco contendores van destinados a materia orgánica (marrón), envases ligeros (amarillos), cartón y papel (azul), vidrio (verde) y el resto (gris). “El objetivo de la recogida selectiva es lograr un mayor porcentaje de reciclaje”, recordó.
Según datos aportados, la Mancomunidad de Montejurra recogió en 2024 un total de 24.576 toneladas de basura que, divididas entre los 53.910 habitantes de su área de influencia, suponen 456 kilos por habitante y año. Este dato representa una disminución del 2% respecto al 2023.
Por fracciones, y atendiendo a los cambios en el modelo de recogida con la introducción del quinto contenedor, los envases representaron en 2024 un 23% del total, nueve puntos menos que en 2023, cuando el gris no estaba en funcionamiento. La materia orgánica supone un 35% del total, dos puntos menos que en 2023, y los contenedores azul y verde se mantienen parecidos.
El 62% de los residuos se reciclan
Del total de residuos que recogió en 2024 la Mancomunidad de Montejurra, un 62% se recicló y/o valoró y el 38% restante fue eliminado. En kilos, fueron 15.336 toneladas las recicladas. Este porcentaje, el 62%, es el mismo que en 2023 y supera a la media navarra, que se situó en el 53% en 2023.
Por otro lado, la entidad destaca que el 100% de la materia orgánica doméstica y comercial fue tratada y 998 toneladas de compost se comercializaron.