La presidenta de la Asociación, Montse Martínez de Carlos, y la vicepresidenta, Marian Orúe Dueñas, se refieren en la siguiente entrevista a las problemáticas de un barrio con un número importante de casas vacías, a las preocupaciones por la suciedad y por los ruidos en una zona de Estella que, aseguran, ha perdido su vida en la calle durante el día y que se ha convertido en un sector por el que la gente evita pasar.
El ámbito de acción del colectivo abarca el área comprendida dentro del perímetro aproximado que trazan la calle Mayor, la plaza de los Fueros, Valdeallín y la calle Chapitel.
MONTSE MARTÍNEZ DE CARLOS. PRESIDENTA:
“EL PRINCIPAL PROBLEMA ES QUE EL BARRIO SE ESTÁ QUEDANDO VACÍO”
MARIAN ORÚE DUEÑAS. VICEPRESIDENTA:
“QUEREMOS UN BARRIO LO MÁS SANO POSIBLE. ESTAMOS EN EL CENTRO, PERO LA GENTE EVITA PASAR”
¿Cómo nace esta Asociación?
Montse Martínez (M.M.). Tiene que ver con un estudio que realizó la Asociación Secretariado Gitano, pedido por el Ayuntamiento, y que hablaba sobre el perfil de personas que vivían en el barrio y sobre las
necesidades. Cuando se dieron los resultados, pensamos que había que hacer algo y que los vecinos del barrio teníamos mucho que decir. Es un barrio que está deteriorado y con muchas viviendas vacías y vimos
necesario movilizarnos.
¿Qué objetivos tiene el colectivo?
M.M. Velar por el bienestar en el barrio e intentar mejorar la calidad de vida de todos los vecinos y vecinas que vivimos en él. Que sea un barrio tranquilo en el que se reconozca el derecho de descanso de los vecinos, un barrio sin suciedad y sin trapicheos. Buscamos que entre todos nos podamos conocer. Nos falta esa identidad de barrio, un tejido social más cooperativo y de convivencia, incluso de ayuda entre nosotros.
Marian Orúe (M.O.). Queremos tener un barrio lo más sano posible. Estamos en el centro de Estella, pero a la vez la gente evita pasar. Se ha quedado como lugar de ocio nocturno, los comercios cierran y hay calles con muy poco tránsito. Queremos revitalizarlo, mejorar la convivencia entre los vecinos, que nos conozcamos, poder hacer actividades que contagien las ganas de mejorar un barrio que tiene una imagen un poco negativa.
¿Cuáles son las necesidades y/o los problemas principales que detectáis?
M.O. Por un lado, está el tema del ruido, no sólo como consecuencia del ocio nocturno, sino también por los servicios de limpieza y el sonido de las campanas, que son exageradas. Por otro lado, destacar el problema de comercios que han cerrado y que se convierten en locales vacíos creando deterioro.
M.M. El principal problema es lo vacío que se está quedando el barrio. Las casas en ruina dan paso a tapias y solares abandonados. Miramos otros barrios, como San Pedro, por ejemplo, y vemos lo bien que
está, sobre todo por el interés particular. Ocurre que en San Pedro una casa es de uno o dos propietarios que se ponen de acuerdo, pero en el casco viejo hay inmuebles de varios propietarios y no salen las cosas. Vemos necesario que se pueda edificar en solares vacíos, que se pueda traer alquiler joven, que se promueva vivienda o servicios en la zona para mantener cierta vida en el barrio.
Respecto al tema de la suciedad, ¿cómo valoráis el problema de los nidos de palomas?
M.M. Creemos que la situación ha mejorado. Desde el ayuntamiento se hizo una intervención que se ha notado. Los bordes de las calles ahora presentan menos suciedad por excrementos de palomas que hace un tiempo.
¿Cómo valoráis la puesta en marcha de la ordenanza ZAC?
M.M. Hay gente a favor y gente en contra, por algunas cuestiones como el tema del aparcamiento dentro de la zona. A nivel personal pienso que, si llevas treinta años aparcando en tu bajera y ahora te piden
vado, pues bueno, igual puede haber unas condiciones más flexibles. Porque, ¿qué vamos a hacer ahora, crear un nuevo problema, sacar treinta coches más, por decir algo, a la calle, cuando siempre han estado dentro?
Como vecinos y como asociación, ¿os sentís escuchados?
M.O. Intención hay, y como muestra, el estudio que el Ayuntamiento encargó a Secretariado Gitano. Por otro lado, vemos que el resto de zonas de Estella también tienen su problemática y nos hemos unido a la coordinadora de barrios que se ha creado hace poco en la ciudad porque juntos podemos impulsar muchas cosas.
M.M. El hecho de poner en marcha esta asociación es también para poder tener voz por lo menos, no como personas individuales, sino como un colectivo, para podernos presentar delante de quien haga falta con la vista puesta en los objetivos de mejora.
¿Cómo os estáis organizando?
M.M. Inicialmente, hemos formado varias comisiones para valorar cuáles son los temas prioritarios de toda la lista que podamos tener y decidir en cual enfocarnos. Tenemos la comisión de Relaciones Vecinales, Comunicación y Dinamización, para dar visibilidad y que la gente esté informada; la de Bienestar del Barrio, para tratar temas de limpieza y ruidos, y la de Economía, para cuestiones relacionadas con subvenciones, tanto para el colectivo como para particulares, que lo puedan necesitar, y para el trabajo de las ordenanzas.
¿Sentís en estos primeros momentos una respuesta positiva hacia el colectivo?
M.O. Hicimos hace poco una reunión de presentación a la que acudieron 40 personas. Algunas ya se han apuntado a las comisiones y todavía se puede sumar más gente.
M.M. Yo creo que hay gente que está esperando a ver cómo arrancamos, e invitamos a los vecinos y las vecinas a que se implique. Hemos puesto una cuota de veinte euros anuales para los pequeños gastos corrientes y hemos contemplado tres maneras diferentes de participar: se puede ser socio pagando la cuota, se puede ser socio y además estar disponible para trabajar en una comisión y se puede ser socio con disponibilidad puntual, en el caso de que se organice alguna cosa y se necesite ayuda. Lo que está claro es que cuantas más personas seamos más posibilidades habrá de hacer grupos de trabajo y más cosas se podrá abarcar.
¿Tenéis alguna idea, alguna propuesta, alguna actividad o iniciativa que como colectivo queréis llevar a cabo?
M.O. Hemos hablado de muchas cosas, pero de momento lo que es seguro es que tenemos ganas de trabajar y de movilizarnos por el barrio, y que necesitamos gente.
M.M. Hay muchas cosas que las tenemos que trabajar desde el barrio con el barrio, como el tema de los ruidos. Creemos que si vamos como asociación hablando de tú a tú las cosas pueden ser más fáciles y se pueden encontrar puntos de encuentro. Ideas tenemos muchísimas, pero ahora cada comisión tiene que decidir por dónde va a empezar a trabajar. Y como dice Marian, estamos ilusionadas, con muchas ganas de trabajar para poder hacer nuestro barrio más atractivo primero para el vecino y también para el visitante.
Seis mujeres en junta
Seis mujeres integran la primera junta de la Asociación de Vecinos del Casco Viejo de Estella-Lizarra, vecinas de diferentes zonas del barrio. Se trata de Montse Martínez, Marian Orúe, Mapi Aramendía, Esther Legaria, Rosa de Luis y Mª Jesús Fernández.
La Asociación pone a disposición de los vecinos un contacto para la recepción de sugerencias y preocupaciones por escrito (cascoviejoestellalizarra@gmail.com), que también se pueden entregar en mano en la Carnicería Aniceto (calle Estrella, nº 5), como entidad colaborada.