Desde el sábado 18 de septiembre, todos los vecinos tienen la oportunidad de aportar sus ideas para un espacio municipal, actualmente en desuso, ubicado detrás del polideportivo, donde antes de esta dotación existía una pista de deporte que trae muy buenos recuerdos a los vecinos. El espacio se ha llenado ahora con cerca de 600 pacas de paja de pequeño tamaño, manejables como piezas de Lego, para favorecer la “construcción comunitaria” de ideas y proyectos.
El concejal del Ayuntamiento de Murieta Javier Martínez de Morentin explica que con esas pacas de paja los vecinos pueden dar forma a sus deseos para un lugar hoy sin uso. “Es un espacio vallado que siempre ha dado mucho que hablar sobre qué hacer en él y cómo darle vida. Ahora es el momento para que los vecinos vayan a pensar sus ideas y a proponerlas. Entre otros ejemplo, algún vecino ha puesto unas gradas”, explica.
El plazo para dar rienda suelta a la imaginación termina el 2 de octubre, con un evento a modo de conclusión. Los participantes harán una puesta en común de los momentos vividos y se revisarán sus creaciones y propuestas. En este divertido juego de arte y participación, el pueblo de Murieta es el único ganador.