A esta idea se refería la presidenta de la asociación, Hafida Chenaqui, en la fiesta inauguración organizada en el patio de la casa de cultura Fray Diego. “Necesitamos ser reconocidas y apoyadas por la sociedad y eliminar los estereotipos. Entre nosotras hay muchas mujeres con carrera e integradas en la sociedad y otras con más dificultades para conseguirlo, por ejemplo por el idioma. Queremos ayudarlas a que participen de la sociedad sin necesidad del apoyo de su marido o sus hijos”, decía. Por ello, la asociación prepara un programa de actividades que incluye formación en el idioma castellano, en informática, en leyes de extranjería y en la búsqueda de empleo, entre muchas otras cuestiones.
El idioma es uno de los grandes problemas con el que las mujeres árabes se encuentran. “Muchas mujeres son analfabetas y por eso es importante realizar cursos de apoyo para que aprendan y puedan realizar cosas cotidianas como rellenar un papel o acudir al médico”, añadía la presidenta.
Según apuntaron las mujeres reunidas en Estella, en la ciudad del Ega convive un colectivo de unas veinte familias árabes de origen marroquí y argelino, las dos nacionalidades que integra ahora mismo la asociación. El número de socias asciende a 50 en la gestación del colectivo. La idea comenzaba en abril de este año y en octubre se hace realidad con la ayuda de la Asociación de Mujeres Progresistas de Navarra y del área de la Mujer del Ayuntamiento de Estella.
