
El sábado 24, el visitante pudo disfrutar con un campamento medieval, a cargo del grupo de recreación Imperial Service, una feria de productos artesanos y talleres medievales de esgrima y cota de malla. También hubo un desfile de moda medieval (siglo X-XII), incluida la moda íntima y de fiesta de diferentes clases sociales, que contó con la participación de 38 modelos, 20 de ellos de Muez. Estrella Iriarte organizaba los pases.
El público pudo hacer pruebas de tiro con arco y vestirse con
la cota de malla
Durante la jornada se recrearon de forma realista los combates de la batalla entre las tropas musulmanas y cristinas. El visitante también pudo practicar técnicas medievales de combate, tirar con arco y probarse las cotas de malla. Por la tarde, llegó el turno de las danzas tribales y del vientre con la compañía Silver Rose, de Puy Ortigosa. Más combates a caballo y talleres, además de un sorteo, cerraron la programación de la primera jornada.
El domingo 25 de julio se organizaba una visita teatralizada a los lugares naturales de la batalla, a cargo del grupo de recreación y con la colaboración del historiador Iñaki Sagredo. Apunta la organización que los vecinos del valle de Guesálaz colaboraron intensamente en el desarrollo de las actividades, siendo los verdaderos protagonistas de su historia. Todos los eventos cumplieron con los aforos y las medidas Covid.