
Con estas dos sentencias, se producen los primeros respaldos judiciales al acuerdo municipal. El Contencioso rechaza los recursos interpuestos por algunos de los propietarios de los terrenos –uno de ellos el que hacía referencia a la parcela sobre la que se había fijado un valor de 108 €/m2 frente al de 43 €/m2 del resto de parcelas- tras la aprobación del acuerdo. Ambas sentencias reconocen “la falta de competencia de las alcaldesas y el hecho de que los convenios se suscribieron prescindiendo total y absolutamente del procedimiento legalmente establecido, incidiendo además en el grave perjuicio que el convenio anulado suponía para el interés público”. La sentencia considera “ajustada a derecho la anulación de los convenios expropiatorios y condena en costas a la parte recurrente”.
Con estas dos sentencias, se producen los primeros respaldos judiciales al acuerdo municipal
Frente al fallo cabe recurso de apelación ante la Sala de lo Contencioso. Con la declaración de nulidad de los convenios y anexos, los terrenos revierten a los antiguos propietarios, que tienen derecho a reclamar la indemnización correspondiente, siempre que justifiquen los daños y perjuicios causados. El caso Oncineda sigue otra vía judicial con las empresas constructoras Herchi y Alhama y según informó Koldo Leoz, portavoz de EH Bildu, “todavía quedan años de recorrido judicial para que el Ayuntamiento pueda disponer de los terrenos y pueda actuar en ellos”. Hasta entonces, el Consistorio reserva alrededor de 2 millones de euros –cantidad en litigio con las empresas constructoras– por si, en el peor de los casos, tiene que pagar.