Participaron en la encuesta 106 personas, de entre 18 y 40 años, un tercio de la población de la zona de esa franja de edad, por lo que desde la Mancomunidad de Servicios Andia consideran que los datos obtenidos son relevantes. “Queremos conocer la realidad de la población joven y de las empresas, así como de las personas diversas del ámbito de la Mancomunidad para analizar la situación de nuestros municipios y proponer medidas ajustadas a las necesidades reales”, explicaba Edorta Lezaun, presidente de la entidad y alcalde del valle de Yerri. Además, desde los diferentes Ayuntamientos reconocen que tras el confinamiento, la vida en los pueblos se ha puesto en valor. “La encuesta nos ha servido para ver que la gente joven tiene ganas de vivir en su entorno rural, la gente joven se quiere quedar y ven con optimismo el futuro del ámbito rural. Consideramos que desde los Ayuntamientos hay que darles alternativas”, resaltaba Elena Cereceda, técnica de dinamización de la Mancomunidad de Andia.
Desde la entidad seguirán las líneas estratégicas del Plan del Gobierno de Navarra que giran en torno a la vivienda y planeamiento urbanístico, al desarrollo económico local, a los servicios y calidad de vida y a la gobernanza y equilibrio territorial.
Vivienda y empleo, principales condicionantes
La mayoría de los jóvenes encuestados destacan que lo mejor de vivir en el pueblo es la calidad de vida y la naturaleza. Entre los mayores inconvenientes, la poca oferta de ocio y el escaso número de jóvenes que, en general, habita en las localidades de la zona. El 49% de las personas encuestadas vive en el pueblo porque es su lugar de nacimiento o el sitio donde se ha criado. El 28% por la calidad de vida que ofrece el ámbito rural, el 14% por motivos familiares, el 7% por trabajo y el 2% por otros motivos. En cuanto a convivencia, la mitad de las personas que respondieron viven con sus padres, tienen estudios universitarios e idiomas y el 74% se encuentra trabajando, en su mayoría en trabajos temporales. La vivienda y el empleo son los principales condicionantes y hay gente dispuesta a emprender, pero necesita apoyo.