La opinión de la calle es la que cuenta. Calle Mayor pregunta en esta ocasión a los vecinos de Tierra Estella cómo ven el sector servicios en la ciudad, en un momento de debate sobre la problemática de locales vacíos y las dificultades para el relevo generacional.
Chahira Kasmi
34 años. Estella. Desempleada.
“Veo que cierran algunos negocios pero que también se están abriendo otros, por ejemplo de ropa. Estella me parece un buen lugar comercial. Yo hago la cesta de la compra y compro ropa para el niño y también para mí, aunque el fin de semana salgo y me gusta ver otros lugares”.
Igor Gómez Echeverría
32 años. Estella. Jefe de línea.
“El comercio va para abajo. Algunos negocios se mantienen pero, en cuanto sales por Estella, ves multitud de locales cerrados. Sin embargo, el comercio electrónico está en auge, y la gente se va yendo a la ciudad. Tendemos a macro ciudades y los lugares pequeños vivirán como puedan”.
Mª Carmen Soltero Oliva
36 años. Oteiza. Cocinera.
“Llevo poco tiempo viviendo por aquí, y a mí me parece que Estella está bien, que tiene variedad de comercios, de productos y precios económicos. Muchos locales están cerrados porque la gente compra en los supermercados y grandes superficies, pero creo que es una tendencia general”.
Alberto Ganuza Salsamendi
64 años. Estella. Jubilado.
“Estella no tiene ahora mucho auge, ha tenido tiempos mejores, cuando no había tantos supermercados ni centros comerciales. Mi sensación cuando paseo por Estella es de tranquilidad, de poco agobio de gente, lo cual es malísimo para la economía de la ciudad”.
Maite López Esquíroz
38 años. Ayegui. Dependienta.
“Son momentos muy duros, los comerciantes tienen que luchar para salir adelante. De todos modos, opino que el comercio minorista va a estar ahí porque la gente valora la atención directa, el cara a cara y el asesoramiento. Al cliente le gusta que le traten bien”.
Anselmo López Oscoz
64 años. Estella. Jubilado.
“Ha vivido un descenso abismal desde la crisis. Pienso que los esfuerzos en esta ciudad se orientan al turismo y lo que nos falta es alguna chimenea, es decir, industria. El relevo generacional de los negocios está complicado. Las grandes superficies y los cambios de hábitos son terribles”.