
El año pasado los gigantes ya bailaron ‘El maya’, pero este año, además, el público lo podrá escuchar gracias al trabajo de la pareja de gaiteros.
“Hasta 1988, cuando se crean las copias de los gigantes, la comparsa no tiene más coreografías que pasacalles y la Marcha San Andrés para la Procesión. Bailaban, pero nada definido, salvo estas dos cosas. En cuanto a la música se echa mano del repertorio habitual de gaita para acompañamiento, pero procede en gran medida del siglo XIX. Si la comparsa se ha tomado el esfuerzo de crear una nueva coreografía, nosotros, como gaiteros, que somos su soporte, nos sentimos obligados a colaborar y contribuir a la renovación del repertorio”, explica Juan Carlos Duñabeitia Cardiel.
Se trata de un vals preparado para la banda, que se ajusta al baile de los gigantes y que les acompañará en su despedida. “El vals es la danza que más se interpreta cuando los gigantes bailan a parado, en un mismo lugar. La pieza tiene una duración de dos minutos y se ajusta a la métrica de todos los valses con tres partes”, añade el gaitero. ‘El maya’ es la primera partitura que los gaiteros preparan para una coreografía, cuando generalmente el proceso creativo es al revés. “Normalmente, primero se compone una música y luego se pone coreografía”.
La banda de música ve con muy buenos ojos esta nueva pieza que, además, incluirán en su concierto en Los Llanos el lunes de fiestas. “Es un vals muy bonito. Estamos encantados de que haya gente que trabaje y se preocupe por incorporar repertorio nuevo”, expresaba el director, Josetxo Sánchez.
Cada uno con su aportación, la comparsa, los gaiteros y la banda, todos ellos dan un paso más en el mantenimiento de la cultura y el folclore local.