
La Escuela de Música Julián Romano de Estella ha decidido poner a disposición de las personas refugiadas de Ucrania que hayan podido ver interrumpidos sus estudios musicales con el estallido de la guerra la posibilidad de seguir con su formación. El Patronato, órgano gestor del Centro, pone a su disposición las instalaciones y los materiales con este fin y los profesores se comprometen a impartir clase de manera altruista para que la música siga presente en sus vidas.
La decisión se hacía pública en el contexto de la iniciativa de la Asociación Española de Escuelas de Música y Danza, secundada por la Escuela Julián Romano, de interpretar el Himno de la Alegría, en señal de repulsa contra las guerras. El miércoles 16 de marzo a las 18 horas se daban cita en el patio de entrada del centro en torno a 50 alumnos y profesores de diferentes especialidades instrumentales.