A pesar de que esta competición fue la última actividad de la tarde, creo mucha expectación. Seis participantes diseñaron y construyeron un robot autónomo. El objetivo de la competición es conseguir sacar al contrincante del tatami circular de 75 cm de diámetro. Cada combate tiene tres asaltos. El Robot ganador fue Let’s Go, de Ángel Marco (Estella), el segundo clasificado fue Polonio, de Ciro y Josué Arzoz (Ancín) y el tercero fue Lucifer I, de Ángel Martínez (Oteiza). “Estamos muy satisfechos de que la afición al diseño de robots de competición esté creciendo en Tierra Estella. Destaca además el compañerismo entre los competidores. Se ayudan unos a otros a resolver los problemas y este es uno de los objetivos que tenemos en la asociación”, declaraban los organizadores.
Yinkana y escornabots
Además de la competición de minisumo se celebraron otras dos competiciones de robótica. La primera fue con vehículos teledirigidos, basados en la tarjeta Arduino, en la que tenían conseguir llegar a meta después de un recorrido complicado o yinkana. El ganador fue Alejandro Eraso, de Calahorra; el segundo clasificado fue Limbai Dallo, de Ancín y, el tercero, Mikel Girón, de Pamplona. La siguiente competición fue la escornabots, diseñados y fabricados por Dictel. El objetivo consistía en realizar un recorrido por una pista con números y símbolos de operaciones básicas, de manera que consiguieran un número preestablecido como reto. El equipo ganador fue el formado por Xabier Esparza y Mario Nogales, de Estella; el segundo clasificado fue Alejandro y Manuel Eraso, de Calahorra; y el tercero Mikel y Danny Girón, de Pamplona.
