“De los 55 vecinos censados,19 viven en Gollano a diario
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El caserío mantiene la estética tradicional de las Améscoas, con caserones de piedra y madera. En el pueblo se conservan restos del torreón del antiguo palacio de Gollano, que data del siglo XV. Su presencia es testimonial. “Quisimos consolidar la ruina que existía y pedimos dinero a Príncipe de Viana, pero no recibimos. Por ello, tuvimos que derribar parte por el peligro de derrumbe que tenía, ya que se encuentra junto a la carretera”, explica otra vecina de Gollano, Pili Aznárez Andueza.
Gollano ofrece una imagen bien conservada. La última actuación realizada ha sido la restauración del lavadero cubierto, ubicado en el centro del pueblo. Las obras terminaron el pasado mes de febrero y se financiaron con ayudas gestionadas desde la asociación de desarrollo rural Teder. Gracias a subvenciones, se ha podido realizar en el pueblo un parque de columpios y se ha restaurado el portal de la iglesia de San Bartolomé. En el templo se oficia misa todas las semanas.
Casas rurales
Gollano ofrece grandes posibilidades para el paseo y muchos son los visitantes que se acercan a la localidad, atraídos por la proximidad del nacedero del Urederra, en concreto, y del parque natural de Urbasa-Andia en general. De hecho, tres son las casas rurales que ofrecen sus servicios. Junto a esta actividad, la ganadería tiene una gran presencia. En término de Gollano se asientan dos ganaderías de vacas y cuatro granjas de pollos.
A excepción de la sociedad, que sirve de reunión de los vecinos, sobre todo en fin de semana, la localidad no dispone de más servicios. Su población de 52 censados y 19 vecinos viviendo a diario, depende de la cabecera de valle, Zudaire, para los servicios básicos. 18 kilómetros dista de Estella y 60 de la capital navarra.
En 2009, Gollano acogía la fiesta del valle de Améscoa. Sus fiestas propias se celebran con motivo de San Bartolomé, en agosto. En esta cita, los niños de la localidad aprovechan para realizar una cuestación de alimentos por las casas con los que preparar después una merienda. De esta manera, la tradición de Lardero, que se suele realizar en invierno, se traslada al verano para aprovechar la presencia de un mayor número de niños. Mediante una cena, los vecinos también celebran el 17 de enero, San Antón. •
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Así es GOLLANO
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