Iniciativa original durante las navidades fue la promovida por los vecinos de Muniáin y Aberin, que lucieron una estética muy especial. Los adornos no faltaron, como el año pasado, si bien su coste fue cercano a cero. Un total de dieciocho vecinos se implicaron en diferentes creaciones para calles y fachadas que tenían como punto en común los materiales reciclados. Una apuesta ecológica, bonita y barata.