¿Qué valoración de este Oinez hace la junta?
Una valoración muy positiva. Tres o cuatro semanas antes estábamos en un escenario muy diferente. No podía haber una charanga, salvo que estuviera quieta, ni una barra montada. Era un mal escenario, aunque estaba claro que había que celebrarlo como fuera, con aforo o con inscripción previa. Así que esta celebración ha sido una gozada. Una vez que se levantaron las restricciones surgieron las dudas y los miedos y tuvimos que medir el mensaje, pidiendo sobre todo responsabilidad. Tras el fin de semana, entendemos que el mensaje caló y estamos muy contentos.
¿Cómo valoráis la respuesta recibida?
Ha sido una fiesta familiar, sin incidencias destacables. La gente ha venido en un plan respetuoso y nuestro análisis es positivo.
¿Ha sido fácil reunir a tanta gante voluntaria para convertir este Oinez en una realidad?
La sociedad actual es difícil de movilizar y eso tiene su reflejo en la propia Ikastola. Todos estamos muy liados, pero el resultado del llamamiento que hicimos para cubrir en torno a 600 turnos de trabajo ha sido una pasada. Daba gusto ver las listas de gente que ha colaborado. Personalmente, satisface una barbaridad. También me ha llamado la atención, no porque otras veces no haya pasado, la cantidad de personas no vinculadas con la ikastola que han querido echar una mano. Y también hay entidades y sectores, especialmente quiero mencionar al Ayuntamiento de Estella-Lizarra.
¿Qué ha sido lo más difícil estos dos años?
Mantener el ánimo de la gente. Mantener la tensión, la energía y toda la maquinaria durante dos años es muy difícil y, más aún, con la situación que cada cual haya podido tener en su casa a nivel personal y laboral como consecuencia de la pandemia.
Una vez que se ha celebrado el Oinez, ¿continúa el trabajo, qué queda por hacer?
El domingo Lizarra Ikastola pasó simbólicamente el testigo a la ikastola de Tafalla, pero de momento toca seguir trabajando en cuestiones como proveedores y en la preparación de todo el material que hay que llevar a Tafalla. También tenemos que redactar las memorias, quedar cada una de las diferentes comisiones y juntarnos después con las de Tafalla, donde haremos una jornada de trabajo.
