
El autor Luis Mari Rodríguez acaba de publicar su segundo libro, ‘Una partida de máscaras’. A lo largo de las páginas, el autor se adentra en los entresijos de la producción operística ‘El baile de máscaras’. Utiliza el montaje de la escenografía, el vestuario y su relación con las máscaras y el carnaval, para configurar el argumento de la novela que, a su vez, se apoya en una serie de reflexiones filosóficas e históricas incardinadas en la trama de un modo coloquial. Sin embargo, esta idea argumental, comienza a ser una excusa para facilitar el desarrollo de otra curiosa y original historia paralela. Una llamada telefónica perturba todavía más el proceso de escritura. La llamada, en presencia del contertulio, filósofo y amigo del autor, produce la chispa que propicia una nueva ficción. El testigo será cómplice y pieza esencial en la nueva narrativa; y es el gancho que hace de nexo entre ambas historias.