La mañana comenzó con auroras, repique de campanas y una misa. Después tuvo lugar el acto más institucional, el paso de testigo de la Fiesta del Valle de Guesálaz de Muez a Iturgoyen, localidad encargada de celebrar el próximo año esta fiesta. A las once de la mañana tuvo lugar el lunch y los más pequeños pudieron disfrutar en los hinchables y en el parque infantil, con pintacaras y otras actividades. La plaza de Muez se convirtió en el epicentro del espectacular desfile de moda antigua, de una colección particular, en el que desfilaron 39 mujeres de la localidad con más de cien vestidos y complementos de diferentes épocas. En la iglesia, mientras tanto, se explicaba el funcionamiento del mecanismo del reloj recuperado por los vecinos. Un mercado de artesanía, un espacio recreativo de Virginia Bosch para visitar, fotografías del valle y un vermú con música de trikitrixa pusieron fin a una animada mañana.
La comida popular, celebrada en una carpa, atrajo a más de 300 comensales que disfrutaron de un buen rato de gastronomía y encuentro. Tras la sobremesa, arrancó una multitudinaria ronda copera por las calles de Muez, al ritmo marcado por la txaranga Igandea. La música fue protagonista durante toda la tarde, con el Dúo Soni2 y con la actuación del grupo Jaitzlisko, de Salinas de Oro. El día culminó con versiones pop-rock con ‘Mister Cover’ y un DJ.
La valoración del día por parte del pueblo de Muez y del Ayuntamiento del Valle es muy positiva. “La palabra clave que define lo que sentimos es satisfacción. Satisfacción por todo el trabajo que se ha llevado a cabo por parte de todas las personas de Muez. Se ha trabajado durante meses en auzolan, se organizaron grupos de trabajo, y salió todo muy bien”, informaba Mª Carmen Vidaurre Azcona, alcaldesa de Muez. El alcalde del Valle de Guesálaz, Juan Antonio Urra, destacó al respecto que “fue una fiesta muy bonita y participativa, en la que hubo actividades para todas las edades y se creó un ambiente muy bueno”. El año que viene será Iturgoyen el pueblo encargado de acoger la Fiesta del Valle de Guesálaz.
Una fiesta del valle en Muez llena de glamour
Sobre una enorme alfombra roja, 39 mujeres de Muez revivieron la elegancia de los años 50, de la época victoriana y de finales del siglo XIX. El desfile estuvo compuesto por 115 pases. En la primera parte se lucieron sombreros y bolsos de los años 50. Después, el estilo Charleston lució en la pasarela en forma de ropa interior, vestidos, etc., y las mantillas españolas tiñeron de negro la pasarela. La época victoriana regresó también a Muez, con moda de ropa interior, en un primer momento, y con diferentes modelos de ropa, en los que solo la parte superior era de la época, en segundo lugar, junto con sombrillas, sombreros y sombrereras. También se lucieron vestidos completos victorianos, de los años posteriores a 1830. El desfile culminó con el vestido más antiguo de la colección, un vestido de novia que data de finales de 1700. El novio también lució un traje de novio de época.
La colección pertenece a la familia Irigoyen de Muez. Varias prendas fueron heredadas de sus antepasados y, poco a poco, fueron complementando la colección. Prendas y complementos, que tal y como informa Belén Portillo, de la familia, “cuidamos con mucho mimo y con muchas bolas antipolillas. También les colocamos ramas de laurel y los tapamos bien. De vez en cuando los sacamos a ventilar”, explica Belén. Parte de la colección se lució en el 165 aniversario de Pastelería Ángela de Estella.
Desde la familia Irigoyen quieren trasladar su mensaje de agradecimiento a todo el pueblo de Muez por el interés y el esfuerzo llevado a cabo para la celebración del desfile.
