José Flamarique, de Elector Pax; Ignacio Sanz, de Orange Estella; Maribel Ausejo, de Maribel; Ana Benito, de Ana Mercería, Iranzu Leza Roa, de Peluquería La Paca, y Jorge Ruiz Luzuriaga, del Bar Restaurante Florida, aseguran que está siendo duro, que sus ingresos se han visto afectados, que han sentido mucha presión y han puesto en marcha todas las medidas exigidas.
La segunda suspensión de las Fiestas Patronales no ayuda y la falta la alegría se percibe en las calles, pero entienden la situación y la afrontan con optimismo y esperanza después de hacer, incluso, una lectura positiva. Porque de todo se aprende.
1. ¿Cómo está llevando este año y medio de pandemia?
2. ¿Le afecta la suspensión, por segundo año, de las Fiestas de Estella?
3. ¿Saca algo positivo de la situación? ¿Se ha reinventado?
José Flamarique Ganuza, presidente de la Asociación. Electro Pax.
1. “Cuando estábamos en confinamiento, éramos esenciales hacíamos servicios mínimos. Yo bajaba todas las mañanas a la tienda y no había nadie por las calles. La plaza, los porches, todo estaba vacío. Nuestro sector ha sido de los que ha trabajado porque, al estar en casa, la gente vio las necesidades. Pero la tristeza que sentí ese tiempo no se me olvidará nunca. Fue una temporada de mucha incertidumbre”.
2. “En fiestas cogemos vacaciones, pero los días de antes son de mucho movimiento porque casi todo el mundo quiere tener las cosas listas. Por otro lado, en estas fechas viene gente de segunda residencia, con más necesidades después de tiempo sin desplazarse”.
3. “Nos hemos tenido que poner las pilas para la venta a distancia. La gente llamaba y pedía por catálogo. Por otro lado, espero que las marcas se hayan dado cuenta de la importancia de contar con proveedores nacionales para evitar situaciones como estar paradas pendientes de piezas de otros países. Fabricar aquí genera empleo aquí y aumenta el consumo aquí”.
Ignacio Sanz Asarta, tesorero de la Asociación. Tienda Orange Estella.
1. “Durante el confinamiento estuve abierto todos los días por ser esencial, pero la gente compró mucho desde su domicilio. En este año y medio he notado bajón, como en todos los sectores, ahora se va recuperando poco a poco.”.
2. “Dos años sin fiestas de Estella es una situación rara. En estas fechas, se veía mucho ambiente en la calle, preparando cosas, había ilusión. Se nota esa falta de alegría que nos afecta a todos”.
3. “En cuanto a nuevas ideas, en mi caso es lo que marca la franquicia. Mi trabajo en el día a día es el mismo”.
Maribel Ausejo Marín, secretaria de la Asociación. Tienda de moda y complementos Maribel.
1. “A mí el confinamiento me pilló sin terminar de liquidar el género de invierno y con la entrada del de primavera, en un momento que no sabíamos hacia dónde íbamos. Me afectó, sin duda, y viví, sobre todo los primeros tiempos de la pandemia, con mucha incertidumbre y tristeza”.
2. “Sin fiestas de Estella pierdo la venta de lo blanco. Aunque todos los años cierro esa semana, son los días de antes cuando se vende. Por otro lado, a negocios como el mío nos ha afectado las no celebraciones porque no se ha vendido apenas ropa de ceremonia ni complementos”.
3. “Una vez que pudimos abrir, como la gente no podía salir, se compró en Estella. La gente prefiere ahora comprar de manera cómoda y segura en lugares de confianza mejor que en centros comerciales. El pequeño comercio, que ofrece ese acercamiento y trato de tú a tú, está a pie de calle. Nos hemos desvivido para cumplir las medidas sanitarias”.
Ana Benito Mendaza, vocal de la Asociación. Ana Mercería.
1. “Para mí este año y medio ha sido duro pero, al vender prendas de casa, el sector no ha sido de los más perjudicados. Aunque sí he notado la caída de las ventas, desde la reapertura en mayo se fue recuperando la actividad. De este año yo destacaría los nervios por esa responsabilidad de hacer las cosas bien en cuanto a higiene. Como propietaria y cliente, creo que el comercio de Estella ha hecho las cosas bien”.
2. “Dos años sin fiestas se nota mucho. En un negocio como el mío en estas fechas se pierde la venta de interiores blancos. También se nota la falta de alegría, y lo digo como comerciante pero también como estellica, aunque la situación se entiende perfectamente”.
3. “Yo he empezado con las redes sociales, para darme más a conocer. Está claro que ante cualquier problema hay que intentar reinventarse. También desde la Asociación se ha creado la plataforma para la compra online que da más visibilidad y opciones al pequeño comercio de Estella”.
Iranzu Leza Roa, vocal de la Asociación. Peluquería Paca.
1. “Ha sido, sobre todo al principio, un periodo duro. Estamos trabajando menos. La gente alarga mucho el corte y hay quien ha decidido teñirse en casa o se ha pasado al pelo cano. La clienta entre 45 y 60 años ha espaciado la frecuencia y las personas mayores tienen miedo de venir a la peluquería”.
2. “Por supuesto que se nota la falta de las fiestas de Estella. Las de Estella, las de los pueblos, las bodas, las comuniones, las bodas de oro. Todo el mundo se prepara para estas celebraciones y la peluquería tiene su importancia, pero ahora no hay ocasiones”.
3. “La formación que ofrecemos ha ido en aumento y, además, durante este tiempo el sector ha invertido en productos. Son dos cosas positivas, pero en términos generales la situación ha afectado mucho el sector. En concreto, vemos que se ha perdido y seguimos perdiendo mucho tiempo y dinero en medidas de higiene”.
Jorge Ruiz Luzuriaga, vocal de la Asociación. Bar Restaurante Florida.
1. “Para la hostelería ha sido un “sentirse señalado y perseguido”, teniendo que soportar diversos periodos de cierre, siendo culpabilizados por la transmisión del virus cuando, incluso desde la sanidad pública, se demostraba que los contagios se producían, en su inmensa mayoría, en el ámbito privado. Y lo que todavía es peor, hemos tenido que hacer de policías, lo cual nos ha enfrentado a clientes que solo miraban por su bienestar, pretendiendo saltarse las reglas establecidas. En el ámbito económico, los mismos gastos, el doble de trabajo, ya casi somos empresas de desinfección, y la mitad de facturación. ¡Muy complicado!”.
2. “No cabe duda que la suspensión de las fiestas es un palo económico para el negocio, pero lo importante es remar todos en la misma dirección y poder seguir trabajando día a día, lo cual nos permitirá salir a flote tanto a nivel de empresas como a nivel de sociedad”.