La carrera en Estella fue muy numerosa con 357 participantes, de los cuales 236 se inscribieron en categoría absoluta (157 masculino, 79 femenino) y recorrieron 3.200 metros por el centro de la ciudad. Las categorías inferiores, un total de 121 participantes, cubrieron diferentes distancias, desde los 250 metros a los 1.000 metros, dependiendo de la edad. Los disfraces pusieron un punto de color y ambiente festivo en la prueba popular celebrada durante la mañana, al igual que en Murieta, que vivió su propia San Silvestre por la tarde.
La fiesta deportiva de fin de año tuvo un significativo seguimiento en Murieta, en su segunda edición, con 92 corredores que disfrutaron de una tarde de agradables temperaturas, entre los 10 y los 12 grados. El público reunido no paró de animar en ambos casos a los atletas. En Murieta la cita terminó con chistorrada, refrescos y hasta polvorones. También hubo sorteos de regalos y caramelos para los más pequeños.
En Arróniz, la I San Silvestre fue igualmente un éxito, con una participación total de 204 personas: 170 mayores de 14 años, 26 menores de 9 años y ocho corredores de 10 a 13 años. La categoría principal recorrió 4.100 metros por el centro de la localidad mientras que los niños cubrieron una distancia corta de 200 metros. La carrera popular, organizada desde el Ayuntamiento y que contó con la colaboración organizativa de numerosos vecinos, terminó con un aperitivo y el reparto de trofeos y chucherías. El deporte fue en las tres localidades la mejor manera de terminar el año.