Destaca en el casco antiguo la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, iglesia de estilo gótico-renacentista, del siglo XVI, que aprovecha la estructura y los muros de una construcción medieval. En el término municipal, localizada en el Camino de Zábal, se encuentra la Cruz de la Soledad.
Abárzuza linda al norte con los términos de Urbasa, Andía y Zumbeltz, al este con Lezaun y Yerri y al oeste con Allín, Améscoa Baja y Urbasa. La distancia que lo separa de Pamplona es de 40 kilómetros, accediendo por la Autovía del Camino, la A-12. De la capital de la Merindad, Estella, le separan tan solo siete kilómetros. Precisamente, La cercanía de Abárzuza con Estella hizo que fuese escenario de numerosas batallas de las Guerras Carlistas, como la famosa Batalla de Abárzuza, en 1874.
Destaca en el término municipal de Abárzuza el Monasterio de Iranzu, ubicado en un entorno natural de sorprendente belleza. El cenobio benedictino, de estilo cisterciense, fue reconstruido por los vecinos de Abárzuza y remodelando con bienes de los Palacios de Artajona y Arteaga. Actualmente es un interesante polo de turismo ubicado en una zona que permite bellos paseos como el Sendero Natural del Cañón del Río Iranzu.
DATOS
Habitantes. 544 de derecho (Fuente: Federación Navarra de Municipios y Concejos).
Comarca. Estella.
Merindad. Estella
P. judicial. Estella
Altitud. 567 m.
Extensión. 14,67 km2.
Fiestas patronales. Dedicadas a San Pedro, se celebran entre el 15 y el 19de agosto.> Alcalde. Alberto Pagola Goñi (A.I. Harrobia)
PUNTOS DE INTERÉS
ARQUITECTURA CIVIL: Edificios con blasones de los siglos XVI al XIX en el casco urbano. Cruz de la Soledad, del siglo XVI. Crucero en el Monasterio de Iranzu, del siglo XVI.
ARQUITECTURA RELIGIOSA: Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, de estilo gótico-renacentista, siglo XVI. Ermita de Santa Bárbara, de origen gótico, hacia el 1500, reformada en la época moderna y localizada en un alto a unos dos kilómetros del núcleo urbano.
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El Monasterio de Iranzu
El Monasterio de Iranzu, de origen cisterciense, comienza a construirse en el año 1176 y se prolonga hasta el siglo XIV. Del conjunto de edificaciones realizadas en época medieval permanece en pie la iglesia, claustro, sala capitular y cocina. A los siglos XVI y XVII se debe el actual estado de la nueva sacristía, el moderno refectorio y el palacio abacial. Destacan la iglesia, de planta rectangular con tres naves de cinco tramos cada una; el claustro, adosado al lado meridional del templo, la sala capitular y la cocina monástica, con el hogar y una gigantesca chimenea sostenida por cuatro arcos apuntados. En 1839, los monjes benedictinos se vieron obligados a abandonar el Monasterio, pasando el edificio a manos del Estado. Tras el abandono de más de un siglo, en 1945 se establece una comunidad de Teatinos que restaura el edificio y lo pone en pie. En 1942, es Príncipe de Viana la entidad que remodela y reforma toda la casa. El Monasterio de Iranzu.
