“La empresa tiene prorrogado el convenio desde hace quince meses”
Los trabajadores se concentraron de 10.00 a 14.00 h., de 18.00 a 22.00 y de 2.00 a 6.00 h. ante la fachada para pedir una negociación. Javier Ibáñez Oraien, de CC.OO., destacó el cambio de estrategia de la empresa durante estos últimos meses. “Hasta agosto en la negociación había entendimiento y se iban alcanzando acuerdos puntuales. La empresa pedía más flexibilidad a cambio de mejoras económicas. Pero después, la estrategia cambia; dicen que no necesitan flexibilidad y que iban a recurrir a expedientes de regulación. Nunca hemos tenido problema para trabajar cuando era necesario, y ahora lo que quieren es mandar a la gente a casa cuando les interese”, apunta, sin pasar por alto que la empresa no tiene problemas económicos.
Las concentraciones de los viernes ante la planta es una medida que se repetirá, de momento. “Queremos obligar a la empresa a negociar y repetiremos el paro hasta que se solucione. Si no podemos sentarnos a la mesa, intensificaremos las medidas de presión”, explicaba Ibáñez, quien calificó de éxito incontestable la movilización, con un cien por cien de seguimiento. “Pero es una desgracia estar aquí”, decía el viernes 1 de abril ante la puerta de la planta.
Cuatro personas de oficina y mano de obra indirecta completan la plantilla de Rodesa, empresa creada en 1999 por Gráficas Estella para imprimir libros de calidad inferior y monocromos. En principio comenzaron catorce trabajadores pero en 2004 la empresa se compromete, por convenio, a invertir con el objetivo de doblar la producción, la superficie de la planta y la plantilla.
