“El Gobierno de Navarra está obligado a ir aceptado una a una todas nuestras alegaciones”, decía Koldo Leoz, de Bildu, en referencia a las alegaciones de su partido, que fueron desestimadas en el pleno del mes de octubre. Sus palabras se referían también a otra de las alegaciones, referente a la alta de una memoria de sostenibilidad económica en el PUM. “El departamento de Fomento advirtió al Ayuntamiento de que el Plan debería contemplar una Memoria, actualmente inexistente y creemos que es competencia del equipo redactor”, añadían.
Los ediles de Bildu se refirieron al gasto que el Ayuntamiento ha hecho con el encargo de informes externos durante los últimos seis años de tramitación del Plan. “Tenemos que denunciar que no debería haber costado más de 130.000 euros y dos años de tramitación como máximo, pero lleva ya un gasto de 800.000 euros y todavía no sabemos cuándo se aprobará definitivamente”.