““Yo veré el árbol todos los días cuando vaya al cole”, decía
el alumno de Santa Ana Álvaro Jordana
“
La propuesta surgió de la concejalía de Servicios y contó con la aprobación de la Comisión, explicaba la edil María José Irigoyen, durante el transcurso del Día del Árbol. “Los árboles son viejos y están muy tocados. Hacía falta sustituir muchos de ellos y era una cuestión, los técnicos lo veían también, de ahora o nunca”.
Los veintitrés árboles que se han eliminado de la parte baja del paseo de la Inmaculada, en uno de sus lados, entre el ayuntamiento y la calle San Andrés, son los primeros de los cien que pueblan la calle y que progresivamente se irán cambiando. “Los más jóvenes que estaban bien se han replantado para sustituir otros en peores condiciones”, añadía Irigoyen.
En cuatro fases, todos los aligustres, variedad de hoja perenne, serán sustituidos por manzanos. En 2014, se realizará el cambio en el lado derecho de la Inmaculada. “Esta especie tiene la peculiaridad de que su raíz es profunda, por lo que evita que se levanten las aceras”, añade Irigoyen. Los manzanos ornamentales, con fruto, que se plantaron el Día del Árbol, tenían ya una medida de cuatro metros, y pueden alcanzar los siete. El hecho de que su hoja sea caduca permitirá que durante el invierno no resten luz y que en verano generen sombra, explicaba la concejal.
La eliminación de los viejos aligustres daba que hablar entre los vecinos durante la tala y también despertó las críticas de Ecologistas en Acción, quienes se opusieron. La estética de una de las calles más representativas de la ciudad del Ega cambiaba su estética durante los días de tala y también con la llegada de los nuevos árboles que crecen ya en el borde izquierdo del vial.
Fiesta escolar
La celebración del Día del Árbol este 2013 era poco menos que histórica, puesto que los aligustres contribuyen a la imagen del Paseo desde hace varias décadas. Para los escolares era igualmente un privilegio participar en la plantación en un lugar tan céntrico como es la Inmaculada. Acompañados por los gaiteros, los participantes se desplazaron desde la plaza de los Fueros hasta el Paseo, donde con la ayuda de azadas y palas, y la asistencia de los miembros de la brigada de Jardines, comenzaron la tarea.
Allí estaba Fahd Ounini Vergarechea, de tres años, acompañada de Paula Villanueva Sanz de Galdeano, de dos años y medio, y de sus madres, Raquel Vergarechea y María Sanz de Galdeano. “De este árbol nos acordaremos siempre. Le hacía mucha ilusión venir”, decía la primera en relación a su hijo, Fahd.
Un grupo de niños se ocupaba de otro de los manzanos, con la ayuda de alguna pala. “Yo me acordaré siempre, porque el árbol está justo delante de la tienda de mi madre. Además lo veré todos los días cuando venga al cole”, decía Álvaro Jordana Erdozáin, de 9 años y alumno de Santa Ana.
Del mismo colegio eran Andrea Albalat Grimal, Ana Blanco Zudaire, Cristina Gil Roa y Micaela Aguinaga Crespo, de diferentes clases de cuarto curso. “Es especial plantar aquí porque lo vamos a ver a menudo. Somos conscientes de que los árboles hay que respetarlos, de eso hemos hablado en el cole”, apuntaba Micaela Aguinaga. Con una chocolatada y una actuación de magia en el frontón Lizarra terminaba una actividad escolar y medioambiental en Estella.
Título
La cifra
La actuación en el Paseo
de la Inmaculada ha tenido
un presupuesto de 3.000 euros
