Los trabajos previos han comenzado con la creación de una comisión de caracterización, de la que forman parte, junto a otras personas, los estelleses Mª Puy Barbarin y Toño Ros. Varias han sido las reuniones para preparar un listado previo de personas que podrían nutrir el proyecto. El concejal de Cultura, Regino Etxabe, comentó en una rueda de prensa sobre la iniciativa que el listado está muy avanzado. “Está muy trabajado, pero no cerrado. Es un proceso abierto en el que aún se puede participar”, apuntaba.
La Comisión tiene en cuenta, además de la presencia equitativa de testimonios de hombres y mujeres, las aportaciones sobre aspectos importantes del patrimonio inmaterial, como los oficios desaparecidos, la religiosidad popular, la pesca en el Ega, los juegos y las canciones de la infancia, la vida en casa, los mercados, las fiestas, la guerra, la vida municipal, la historia política, los carnavales, la danza y la música.
“La comisión ha dado nombres de personas interesantes por su profesión, por su participación en el folclore, etcétera. Incluso se ha recurrido a las residencias de la ciudad para saber si hay personas con capacidad comunicativa y buena memoria”, apuntó una de las personas implicadas en el proyecto, Itziar Luri, de Labrit Multimedia.
Regino Etxabe, Itziar Luri, María Puy Barbarin y Toño Ros estuvieron acompañados en la rueda de prensa por el alcalde de la ciudad, Koldo Leoz, y el director técnico del Archivo de Patrimonio Inmaterial de Navarra y profesor de la UPNA, Alfredo Asiáin. Asiáin destacó la oportunidad única que brinda el proyecto de salvaguardar el patrimonio que generaciones anteriores pueden trasmitir. “Es una oportunidad única de rendir un sentido homenaje a las personas que nos han dado nuestro carácter, de hacer un retrato representativo de una generación”, apuntó.
El primer edil destacó la importancia del proyecto para la ciudad. “Tenemos arquitectura y paisaje, castillos, muralla, piedras cargadas de historia, pero no debemos dejar de lado otro patrimonio, el que le da vida y carácter a la ciudad: las personas. Ellos pueden enseñarnos cómo se vivía en Estella. Con este proyecto Estella-Lizarra va a tener una mejor memoria que servirá para avanzar hacia el futuro”.