Nota destacada fue el escaso número de cabezas de ganado en la plaza Santiago, el principal atractivo de una feria cuyos orígenes se remonta siglos atrás y que tradicionalmente concentraba a numerosos vendedores y compradores que realizaban sus acuerdos a primera hora de la mañana. En esta edición, siguiendo una tendencia decreciente, los caballos, yeguas, ponis y burros presentes en la plaza no superaron la centena y poco más de 60 fueron las transacciones realizadas.
Para dotar de contenido, en los últimos años las hípicas de la zona participan con sus paseos, y también en las últimas ediciones se implican en novedades, como la simulación de la bajada del ganado de la sierra que representaron el sábado. Este año, rendían un homenaje al padre de Pablo Hermoso de Mendoza, Pablo Hermoso de Mendoza Galdeano.
Un taller y una demostración de forja, a cargo de Forja Brun, de la localidad navarra de Izurdiaga y con una trayectoria de 350 años y varias generaciones, mostraron el físico trabajo que todavía hoy siguen realizando. El público pudo ver de cerca las herramientas y aperos como el yunque o el fuelle, además de sorprenderse con un trabajo en equipo de mucha precisión y coordinación. La plaza Santiago completaba su actividad con una selección de puestos especializados en artículos artesanos vinculados con la ganadería y el pastoreo.
La artesanía tenía su epicentro en la plaza de los Fueros. Sábado y domingo los puestos pusieron a la venta los productos de la tierra, desde alimentarios hasta de decoración y textil a partir de diversos materiales, como el cuero, la madera o la plata. Las encajeras de Tierra Estella ofrecieron un ejemplo de su actividad y de sus labores.
El discurrir de la gente era constante entre las plazas, a través de las calles aledañas, como la calle San Andrés, que comunicaba con la Coronación. En este lugar, reservado para el queso, se dieron cita trece artesanos con Denominación de Origen Idiazábal que participaron en el Concurso de Quesos.
El veterano quesero y ganador Ricardo Remiro volvió a conquistar al jurado con su producto elaborado en Eulate. Voluntarios de la asociación de vecinos del barrio de San Pedro se encargaron del reparto del queso de la degustación popular. Hubo un segundo y un tercer premio, que recayeron en los Hermanos Aguirre, de Aranarache, y en López San Martín S.C., de Lezáun.
Mientras tanto, la plaza de San Martín acogía otra degustación popular, la de la ternera de Navarra. Socios voluntarios de la Peña San Andrés y carniceros de Estella trocearon en pinchos la pieza de 200 kilos, cuyo asado comenzaba de víspera. Una larga cola se formó, hasta el final de existencias, para probar el delicioso bocado.
El programa de ferias, que se completaba con otros actos, como una demostración de perros pastor con ovejas y vacas escocesas el mismo domingo. A lo largo del fin de semana también se realizaron actuaciones de música y danza en la calle, bombas japonesas, toro de fuego y juegos infantiles, partidos de pelota y las visitas guiadas sobre la figura de San Andrés.
Todo ello conseguía el objetivo buscado: llenar de gente las calles de la ciudad, los establecimientos de hostelería y los comercios, muchos de los cuales, además, celebraron durante todo el fin de semana la iniciativa del Black Friday con descuentos especiales.
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Concurso Morfológico de Jaca Navarra
El sábado era también día de ferias en Estella y con especial importancia del ganado. La plaza de Santiago acogió la ya octava edición del Concurso Morfológico de Jaca Navarra, que contó con la presencia de 65 ejemplares, pertenecientes a una docena de ganaderos navarros. Los animales alegraron el paseo de las familias mientras se desarrollaba el certamen.
El fallo del jurado fue: Mejor semental, Iru, de la ganadería de Iturgoyen Ángel María Argandoña; premio al potro de menos de tres años para un ejemplar de Mikel Urtasun, de la localidad de Arboniés; Beltza, propiedad de Eduardo Braco, de Aspurz, fue la mejor potra de menos de tres años; de Beintza-Labaien venía la yegua de más de tres años ganadora, del ganadero Tomás Saldias. El mejor lote fue de Burgui, de Asier Yabar; la cabeza más bonita era de un ejemplar de Mikel Jiménez, de Mendigorría, y el mejor animal de la feria, también de Luis María Urabayen, de Iturgoyen, tenía el nombre de Perla.
Lunes, día del Patrón
El lunes 30 de noviembre, San Andrés, amaneció frío pero con el sol y la luz del fin de semana, lo que animó a los vecinos a reunirse ante la fachada del ayuntamiento de Estella para ver la salida del Ayuntamiento en cuerpo de Corporación.
Primero los danzaris txikis de los tres grupos de danzas de la ciudad –Larraiza, Ibai Ega y Virgen del Puy y San Andrés, este último con parejas de adultos también-, seguidos por gaiteros, por los músicos de la banda, los timbaleros y maceros y el Ayuntamiento. Jorge Crespo, el más joven, portaba la bandera de la ciudad, seguido del resto de miembros, de todos los partidos políticos que integran la Corporación.
La comitiva se desplazó hasta la iglesia de San Pedro, llena de fieles para honrar al patrón. La eucaristía la presidieron los concejales de tres grupos municipales -UPN, PSN y Geroa Bai-. El alcalde, Koldo Leoz, y los ediles de su partido –EH Bildu- que participaron en la procesión, así como los de Ahora-Orain, optaron por no asistir.
Por la tarde, la plaza San Martín acogía una chocolatada popular y juegos infantiles, amenizados por los gaiteros de Estella. A las seis de la tarde, se inauguraba la iluminación de Navidad.
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